Al pensar en Hong Kong, la primera imagen que viene a nuestras mentes es su impresionante silueta de rascacielos llenos de luz, pues esa imagen la puedes ver todos los días en una de las principales ciudades mundiales, en la asistirás a un colegio cuyas clases serán en inglés y convivirás con una familia en la que aprenderás el fascinante idioma cantonés.
Hong Kong es uno de los centros financieros más importantes del mundo, con la puntuación más alta del Índice de Desarrollo Financiero y consecuentemente se ubica como la entidad económica más competitiva del mundo. Su moneda de curso legal, el dólar de Hong Kong, es la moneda más intercambiada del mundo. La economía, dominada por el sector comercial de Hong Kong, se caracteriza por una tributación simple con un nivel competitivo de impuesto de sociedades y apoyada por la confianza internacional en su sistema judicial independiente en el que el estado de derecho, no regido por ley, se aplica a los procedimientos legales y contractuales. Hong Kong tiene uno de los mayores ingresos per cápita en el mundo y es reconocida por la seguridad en la que se desarrolla su vida ciudadana.